Jenny estaba muy contenta con la casa que habían encontrado. Por primera vez en su vida estaba en el lado este de la ciudad. Empaco sus cosas con mucho entusiasmo, mientras miraba sus nuevas cortinas moverse con la brisa. Era maravilloso tener por fin su propio cuarto. Las clases comenzarían pronto, y tendría nuevos amigos. La dejarían ir a quedarse a dormir e ir a fiestas, estaba muy feliz. Era justo como ella quería que fuera su vida.
El primer día de clases todo iba bien. Hizo nuevos amigos e incluso tenía una cita. Pensó, "quiero ser popular y lo voy a ser, porque tengo una cita con el capitán del equipo!" Para ser conocida en esta escuela tienes que tener reputación, y salir con este chavo seguro la ayudaría. Solo había un problema. Sus padres dijeron que era demasiado joven para tener citas. "Bueno, simplemente no les diré toda la verdad, no notarán la diferencia; que puedo perder?"
Jenny pidió permiso a sus padres de quedarse con unos amigos esa noche. Sus padres pensaron un rato y dijeron, "Esta bien".
Emocionada, se preparó para el gran evento. Pero cuando salió apresurada como iba se sintió mal, sentía el remordimiento por las mentiras. "Pero ¿Qué es una pizza, una fiesta, y un paseo nocturno? Bueno, la pizza estuvo bien, y la fiesta genial, Pero el paseo tendría que esperar". Jeff estaba medio ebrio en ese momento. Pero la besó y le dijo que estaba bien. Entonces el cuarto se lleno de humo y Jeff fumó un poco. Jenny no podía creer que él estuviera fumando eso.
Ahora Jeff estaba listo para ir al mirador pero solo hasta fumarse otro cigarrillo. Se subieron al carro para el paseo, sin pensar en que él estaba demasiado borracho para manejar. Finalmente llegaron al mirador, Y Jeff comenzó a propasarse. Eso no es lo que Jenny quería del todo. "Tal vez mis papás tienen razón... quizá soy muy joven para salir. Hijole, como pude ser tan tonta".
Con todas sus fuerzas, empujó a Jeff: "Por favor llévame a casa, no me quiero quedar." Jeff arrancó el carro y comenzó a conducir. En cuestión de segundos ellos iban muy rápido. Como Jeff manejaba con un salvaje enojo, Jenny sabia que su vida estaba en peligro. Le rogó para que fuera más despacio, Pero él iba más rápido entre más se acercaban a la ciudad. "Solo déjame llegar a mi casa!, confesar, Que mentí. Yo solo quería un paseo".
De repente, vio un gran resplandor. "Oh Dios, Por favor ayúdanos! Vamos a chocar!" Ella no recuerda la fuerza del impacto. Solo que todo de repente se puso negro. Ella sintió que alguien la sacó del carro torcido, Y escuchó, "Llamen a una ambulancia! Estos niños están en problemas!" Escuchó varias voces... unas palabras a lo mucho. Pero sabía que había dos carros involucrados en el choque. Luego se preguntó si Jeff estaba bien, y si la gente del otro carro estaba viva.
Despertó en el hospital viendo caras tristes. "Estuviste en un choque y todo se ve mal". Esas palabras sonaron como eco en su cabeza, mientras delicadamente le decían que Jeff estaba muerto. Le dijeron "Jenny, hacemos todo lo que podemos. Pero parece ser que te perderemos a ti también." "¿Pero, la gente del otro carro?" Jenny lloró. "Lo sentimos Jenny, También murieron." Jenny oró, "Dios, perdóname por lo que he hecho. Yo solo quería una noche de diversión." "Dígale a la familia de esas personas que me perdonen, el haber hecho que sus vidas se acabaran, y que quisiera regresarles a sus seres queridos. Dígale a Papá y Mamá que lo siento por que mentí, y que es mi culpa que varios hayan muerto. Oh, enfermera, ¿no les puede decir eso por mí?"
La enfermera solamente se quedo ahí, nunca accedió. Pero tomo la mano de Jenny con lagrimas en sus ojos y después de unos instantes Jenny murió.
Un Doctor le pregunto a la enfermera "¿por qué no hizo lo mejor para cumplir la última voluntad de esa niña?" Miro al hombre con ojos llenos de tristeza. "Porque la gente en el otro carro eran su Papá y su Mamá.